El Villarreal atraviesa por un gran momento deportivo. El submarino amarillo ya empieza a notar la mano de Unai Emery en el juego del equipo. Los resultados son excelentes y el equipo crece jornada a jornada. Los jugadores atribuyen esta mejoría a su entrenador.
La buena dinámica en la cual está sumergida el conjunto castellonense destacan varios jugadores que en principio no entraban en los planes del club y estaban destinados a tener poco peso en la plantilla. Emery decidió apostar por ellos y jugadores que comenzaban la temporada con muchas dudas como Alfonso Pedraza, Jaume Costa o Mario Gaspar han revertido sus situaciones para tener un rol más importante en el equipo.
En el caso de Gaspar, una charla entre jugador y entrenador fue clave para mejorar la situación. El técnico vasco manifestó de forma privada y pública que su intención era devolverle el estatus de internacional con la selección española
Alfonso Pedraza tenía pie y medio fuera del equipo, pero desde el primer instante el técnico se negó a su salida. Así se lo trasladó al club y al mismo jugador en persona. Una apuesta que se ha visto reflejada en los once iniciales. Su buen desempeño le ha convertido en uno de los jugadores más destacados, devolviendo la confianza que Emery depositó en él.
Por último, está Jaume Costa. Después de estar cedido la pasada temporada en el Valencia, el valenciano regresó al club como cuarto lateral izquierdo. Esta situación invitó a pensar en una probable salida del club groguet. Con el permiso de Emery, el jugador decidió quedarse en el equipo y encontró acomodo en el centro del campo. Asumiendo el rol de veterano, Costa se ha convertido en parte importante de la plantilla, principalmente disputando partidos de competición europea.
El Villarreal actualmente se encuentra en la tercera posición de La Liga Santander y lidera su grupo en la Europa League.
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